1 jul 2011

Nota de autor IV

Siento, apreciados lectores y en muchos casos amigos, estas pequeñas vacaciones que he tomado para despejar mi mente. He de decir, a mi defensa, que no he descuidado el intelecto pues he seguido leyendo y tras finalizar El maestro de esgrima, de Arturo Pérez Reverte, leo El conde de Montecristo, de Alejandro Dumas. Espero volver pronto con alguna reflexión o curiosidad. Saludos y buen verano